Las horas más oscuras, el poder de la política
El director Joe Wright nos trae una de las obras cinematográficas más destacadas de los últimos años, tras ofrecernos un vistazo más humano y glamorosamente político hacia uno de los acontecimientos más importantes de la historia internacional, destacando principalmente el nombramiento de Winston Churchill como primer ministro del Reino Unido y ofreciendo una detallada historia que en todo momento impresiona por su buen desarrollo. ¿Es este el mejor papel de Gary Oldman?
Las horas más oscuras (Darkest Hours) es una cinta con trama histórica que retrata momentos cruciales ocurridos durante la segunda guerra mundial; una historia real y cruda que, de manera efectiva, mantiene al espectador en constante tensión al recurrentemente mencionar distintas dificultades que grandes conocidos del mundo propician, como Adolf Hitler y Benito Mussolini. El guión de la cinta es efectivo, y de la mano de Anthony McCarthen logra humanizar a un mandatario popular que de manera frecuente ha sido retratado como un simple alcohólico e irresponsable.
La cinta, que será estrenada en nuestro país el 19 de enero, revela la manera en que Winston Churchill lidiaba con el alcohol, que si bien influyó demasiado en su día a día, también comprueba su gran resistencia al mismo y la hilaridad con que este se toma la vida, aún estando bajo presión. Gary Oldman, también presenta a un Churchill hogareño, que gusta de estar con su esposa y convivir con sus empleados, y aliados. Su gran afición por estar en contacto con su “pueblo” está perfectamente puesta en una escena singular que involucra el subterráneo del Reino Unido.
La falla más notoria del filme es, posiblemente, que su desarrollo no está dispuesto para gustar a las grandes masas sino todo lo contrario. Las horas más oscuras resulta interesante y a pesar de ser un largometraje bélico, no basa sus mejores momentos en crudas batallas ni sangrientos acontecimientos; aquí la intensidad reside en diálogos y discursos que al menos a mí me provocaron emoción incontrolada y piel chinita cada que Winston tomaba valor de hablar ante el parlamento que para nada favorece su nombramiento, lo cual irá cambiando con el avance de la película.
Uno de los mayores aciertos de Las horas más oscuras son las actuaciones, mismas que son impresionantes en todos o la mayoría del reparto elegido para dar vida a Winston Churchill y compañía. Gary Oldman, Kristin Scott Thomas, Ben Mendelsohn, Ronald Pickup, Stephen Dillane, Nicholas Jones y Samuel West hacen un trabajo perfectamente pulido y bien supervisado por Joe Wright, quien nuevamente demuestra el dominio y control que tiene por su obra, siguiendo los pasos de Ana Karenina y Orgullo y Prejuicio.
La fotografía es oscura – como el nombre de la cinta – y con tonalidades frías la mayor parte del tiempo, sin embargo la vista que esta otorga a través del lente y en una gran pantalla son características que aderezan al largometraje para verse un tanto más “retro” y combinar perfectamente con el vestuario, y escenografías que han sido elegidos para traer a la vida a todos estos increíbles personajes con los que nos hubiera gustado convivir.
En conclusión, Las horas más oscuras es un largometraje sorprendente que nos presenta a un Winston Churchill mucho más humanizado, sarcástico y sabio que nunca antes. La historia que acontece durante la segunda guerra mundial, también fungirá como buen complemento para todos aquellos que el año pasado vieron y disfrutaron otras películas de este estilo – dígase Dunkerque-. Tiene actuaciones impresionantes y una fotografía melancólica que seguramente les encantará. Un proyecto cinematográfico que debes ver y una excelente opción para este primer mes del 2018.